El restaurador, igual que su hermano Sergi, es incapaz de devolver los préstamos que tiene vivos y se acoge a la ley de la segunda oportunidad en su causa mercantil.
Eduard Arola, empresario del sector de la hostelería, se ha declarado en concurso de acreedores al no poder hacer frente a las deudas generadas por sus anteriores negocios. Unos 220.000 euros que el restaurador pedirá al juez que se le exoneren en base a la ley de segunda oportunidad, vigente en España desde 2015.
Su hermano, el conocido chef Sergi Arola, también ha ido a un concurso de acreedores. Fue junto a él que Eduard se inició en el sector, ya que trabajó durante seis años en el restaurante que dirigía el cocinero en el Hotel Arts antes de emprender sus propios proyectos.
Las consecuencias de la deuda
Eduard Arola montó un conocido gastrobar en Barcelona y un restaurante ruso junto a su expareja, un negocio que ha abandonado aunque el establecimiento sigue en marcha. Pero las deudas que contrajo con estos proyectos aún le atormentan: “A la larga, esto te hace mucho daño. Te destroza la vida”.
“Perdí a mi mujer. Incluso me tuve que ir a Colombia”, recuerda. Allí trabajó durante un tiempo, también en la restauración, antes de volver a España. Y llegó a tener un cobrador del frac: “Me hizo la vida imposible”.
Una inversión que se disparó
Arola argumenta que fue “víctima del endeudamiento”. Explica que destinó todos sus ahorros en sus negocios en 2010 y detalla que la inversión asociada a su proyecto de restauración en base a la gastronomía rusa creció hasta el medio millón de euros, aproximadamente. Los bancos no dudaron en prestarle el dinero, pero afirma que la crisis de 2008 se llevó sus planes de negocio por delante. Se quedó sin clientes y las condiciones de los créditos tenía concedidos cambiaron, sus intereses se dispararon.
El restaurador advierte de que “muchísimos españoles se endeudan” y vaticina que “se van a generar muchos más Eduard Arola”, sobre todo en el sector de la restauración por la “dura” situación actual. Ante la nueva crisis, la generada de la pandemia, cree que “el Estado está dando la espalda a los gastos fijos” y que el Gobierno debería “ser más empático y endeudarse”. “No le queda otra”, asegura.
Nuevos proyectos
Por ahora, el empresario espera que el Juzgado de lo Mercantil 10 de Barcelona le perdone el 100% de la deuda privada: “Si no, no voy a levantar cabeza”. Para ello, ha recurrido al bufete Repara Tu Deuda, que se especializa en casos de segunda oportunidad. Dicha segunda oportunidad sirve, siempre que el afectado no tenga ninguna propiedad, para quitarse de encima lo que se debe a privados, en este caso, a cuatro entidades financieras, pero no a Hacienda. Arola debe 16.513 euros a la Seguridad Social. “Dejé de pagar autónomos para pagar a mis trabajadores, cosa que mi mujer me reprochaba”, afirma.
Si se le concede lo que pide, el restaurador catalán espera poder empezar de cero. Esta vez, en Andalucía, donde está instalado en la actualidad. Ahora cobra la prestación de desempleo, pero espera trabajar en restaurantes de tapas de autor. “Tengo proyectos sobre papel, pero no me voy a endeudar nunca más”, sentencia.